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Equipos de Nuestra Señora en Lugo


Edward Suárez es el nuevo responsable de comunicación del movimiento Equipos de Nuestra Señora en Lugo, y nos da a conocer en qué consiste este movimiento y lo que aporta a los matrimonios que lo integran.

  • ¿Qué es Equipos de Nuestra Señora?

Equipos de Nuestra Señora son matrimonios que, en unión con otros matrimonios, conforman un equipo formados por unas tres a cuatro parejas. El equipo se reúne para vivir la fe con las enseñanzas de Nuestro Señor Jesucristo y de la mano de un consiliario, que es un sacerdote.

Nos reunimos una vez al mes y tenemos como guía un pequeño libro, facilitado por el propio movimiento, que nos ayuda  a cómo llevar el matrimonio, cuál es la enseñanza que tiene la Iglesia para nuestra unión y así también poderlo transmitir a nuestros hijos.

 

  • ¿Cómo se organizan las reuniones?

Para la reunión mensual se elige, por turnos, a un matrimonio del equipo que es quien prepara el tema del encuentro. El resto de los matrimonios tienen la responsabilidad de prepararlo también para después poder compartir su experiencia, lo que opinan del tema y así, poder sacar el mayor provecho.

La reunión es en una parroquia o en la casa de uno de los matrimonios y se va alternando cada mes.

Por ejemplo, mi equipo se reúne en una parroquia y aprovechamos que está el sacerdote. Tenemos una puesta en común, dedicamos un tiempo de la reunión para conversar con el resto de los matrimonios sobre lo que hemos hecho a lo largo del mes, y cómo hemos vivido nuestra vida espiritual con relación a las enseñanzas aprendidas en cada uno de los temas.

Lo importante es vivir lo que aprendemos en la reunión. A veces no es fácil, y otras veces es sencillo. Pero la idea fundamental es hacer un esfuerzo para tratar de vivir esa enseñanza que cada mes llega a nosotros y que tratamos de discernir lo mejor posible.

  • ¿Qué aporta Equipos de Nuestra Señora a los matrimonios?

Equipos de Nuestra Señora es una oportunidad para poder enfrentar el día a día de un matrimonio. Al igual que cuando eres padre, el nacimiento de tu hijo no viene con un manual sobre cómo cuidarlo, lo mismo ocurre cuando te casas y tomas la responsabilidad de vivir en comunión con tu pareja: hay momentos en los que surgen diferencias, o algunos inconvenientes, por llamarlo así.

En las reuniones se dialoga sobre cómo llevar el matrimonio en los buenos tiempos, que es muy fácil, y en los malos, que ya es otra cosa.

Cuando abres tu corazón y tu vivencia como matrimonio, cuando logras esa afinidad con otras parejas y puedes abrirte y plantear las situaciones que estás viviendo, realmente aprendes mucho de lo que te puedan decir otros matrimonios que también pueden haber pasado por esa situación.  

Es increíble la riqueza de los matrimonios que llevan 50 años de casados, es impresionante. Y te ayuda a entender que, a veces, los problemas que puedes tener en tu matrimonio son cosas que simplemente con tomar una decisión, entenderse, conversarlo, dialogar, puedes solventarlos. Entre las riquezas que tiene Equipos de Nuestra Señora, esa es una de las más grandes.

 

  • Invítanos a participar en el movimiento

 La idea es que los matrimonios que sientan la necesidad de vivir su fe, sepan que hay un grupo, que es Equipos de Nuestra Señora, en donde pueden vivir su fe.

En un mundo en donde pensamos que nos estamos alejando de Dios, de las enseñanzas de Jesucristo, y estamos entrando en lo banal, sientan la esperanza de que pueden vivir su fe en matrimonio.

Invitamos a todos los que tengan esa curiosidad de querer pertenecer a Equipos de Nuestra Señora, que  pregunten a sus párrocos y de esta manera contactar con nosotros. O bien, pueden comunicarse con nosotros, en el teléfono 622 952 294. Ahí, con gusto, nos pondremos en contacto para hacer nuestra primera reunión y hablarles sobre Equipos de Nuestra Señora. Primero habrá un pilotaje y después pasarán a estar con un grupo que ya está conformado, donde se les acogerá.

De verdad que la experiencia es súper amena, si desean participar es una excelente oportunidad y aquí estamos.