La pedagoga y presidenta de la Fundación Trilema, Carmen Pellicer, fue la encargada de la ponencia de esta segunda sesión del encuentro de responsables de colegios diocesanos.
En su intervención abordó la transformación educativa antes los cambios que también está sufriendo la Iglesia con la disminución de las vocaciones religiosas. Animó a vivir el proceso como una oportunidad y no como fracaso. La realidad de la educación religiosa en otros países como una educación de referencia invita a ver que el futuro puede ser exitoso.
Reflexionó, además, sobre la necesidad de recuperar la conciencia de las comunidades cristianas de que la Iglesia es el futuro de la transmisión de la fe, es necesario trabajar, insistió, en la comprensión de que la escuela como una fuerza evangelizadora, y que contar con colegios católicos es un privilegio en ese sentido.
Lejos de la imagen que parte de la sociedad tiene sobre la escuela católica como algo elitista o innecesario ante una educación pública, es necesario manifestó Carmen Pellicer, recordar que los colegios católicos nacieron, y la mantienen, una vocación social indiscutible y surgieron para prestar una educación cuando nadie lo hacía, respondiendo así al principio de subsidiariedad.
Antes de comenzar, los asistentes compartieron un rato de oración en la capilla del Colegio Diocesanos María Auxiliadora donde tiene lugar la mayor parte del encuentro.
Aprovechamos también para grabar un programa de “Polo Camiño da fe” e intentar mostrar esta realidad educativa que cada vez tiene más fuerza en la Iglesia y en la sociedad.
