La Diócesis de Lugo y la Xunta de Galicia han completado en los últimos meses diversas actuaciones de conservación y restauración en varios templos del ámbito rural lucense, dentro de la colaboración estable y creciente entre ambas instituciones para la protección del patrimonio histórico y religioso.
Por un lado, han finalizado las obras de restauración integral de la iglesia de Santalla de Rebordaos, en O Saviñao. La intervención ha permitido renovar completamente la cubierta y la estructura de madera, mejorar la estanqueidad del edificio, restaurar los paramentos interiores con criterios de respeto a la fábrica original y dignificar elementos singulares como la pila bautismal. También se ha renovado el pavimento y se ha instalado una iluminación más adecuada, además de acometer trabajos de limpieza en las fachadas y su entorno.

Paralelamente, en el marco de un convenio de colaboración entre la Xunta de Galicia y la Diócesis de Lugo, se han desarrollado otras actuaciones de conservación en las parroquias de San Paio de Paradela (Toques), Santa María de Carteire (Palas de Rei), Santa María de Cabanela (Navia de Suarna), Santo Estevo de Pousada (Baralla) y en la reitoral de Santa María de Ferreira de Pallares (Guntín). En estos lugares se han llevado a cabo trabajos destinados a mejorar el estado estructural de los edificios, corregir patologías detectadas y asegurar la adecuada conservación de los inmuebles.


Todas estas intervenciones reflejan la preocupación por la conservación del patrimonio religioso, especialmente en las pequeñas comunidades rurales, donde estos templos constituyen referentes culturales, espirituales e identitarios. La Diócesis de Lugo continuará impulsando iniciativas que garanticen la protección y transmisión de este legado a las generaciones futuras.


María José Campo



