En 2025, la Iglesia conmemora el centenario de la canonización de Santa Teresa del Niño Jesús y de la Santa Faz, carmelita, doctora de la Iglesia y proclamada por Pío XI patrona de las misiones junto con san Francisco Javier, pese a que nunca salió físicamente del Carmelo de Lisieux.
Una santa de la confianza y la misión
Santa Teresa ingresó en el Carmelo a los 15 años y murió con apenas 24, sin haber realizado viajes ni grandes obras externas. Sin embargo, su oración, sus cartas a misioneros y su ardiente deseo de anunciar el Evangelio hicieron de ella una auténtica evangelizadora “desde dentro”.
En sus escritos, Teresa aseguraba: «Quiero ser misionera, no solo por algunos años, sino desde la creación del mundo hasta la consumación de los siglos». Fue precisamente este ardor universal lo que llevó a Pío XI, en 1927, a nombrarla patrona de las misiones.
El mensaje vivo de Teresa
En 2023, el Papa Francisco publicó la Exhortación Apostólica C’est la confiance (“Es la confianza”), título tomado de una frase de Teresa, en el marco del 150º aniversario de su nacimiento. En este documento, resalta la primacía de la confianza en el amor misericordioso de Dios, el valor del abandono espiritual, y el papel de la pequeña vía como camino de santidad accesible para todos.
Se subraya que Teresa no propone una espiritualidad basada en hazañas heroicas externas, sino una vida de humildad, sencillez, apertura al don de Dios.
María José Campo